jueves, 24 de noviembre de 2016

Resumen Foro #TenderPuentesCS #21N "La democracia no se defiende desde el sofá"

Por Juan Carlos González
Coordinador Federal Cristianos Socialistas PSOE

El 21 de noviembre pasado, convocados por el Foro Tender Puentes de Madrid, un concurrido número de personas decidieron abandonar su sofá y participar en el encuentro sobre "Iniciativas para la Regeneración democrática" en la Parroquia San Estanislao de Kostka de Madrid.

El acto comenzó con las palabra de Emmanuel Buch, pastor evangélico de la Iglesia "Cristo Vive", quien expreso: “Para regenerar la democracia, es necesario regenerar a los demócratas”. E insistió en la necesidad de recuperar la ejemplaridad de todos los ciudadanos y especialmente de quienes tienen responsabilidades públicas. 


Me parece muy interesante la reflexión de  Buch, indicando la ausencia de responsabilidad en las acciones cotidianas de la mayoría de la ciudadanía. Es imprescindible para la regeneración democrática  asumir responsabilidades personales y colectivas. Asumir estas responsabilidades, para Buch, se resume en ser capaz de encontrarse con el otro y sobre todo implicarse en la resolución de la realidad y no hacer delegación de funciones y menos aún  de responsabilidad.

Sí, para Emmanuel Buch, recuperar la vinculación y afecto, de los ciudadanos, con todas las instituciones lleva implícito que estos  ejerzan su capacidad de actuación, su autonomía y no hagan dejación de sus tareas, encargando a otros la responsabilidad de actuar ante la compleja realidad.

Buch concluyo su primera intervención subrayando la necesidad de "verter la vida", entregarla a una causa con el objetivo de servir al bien común.

Continuo Francisca Sauquillo, presidenta del comisionado para la Memoria Histórica del Ayuntamiento de Madrid, manifestando que: “La desigualdad es la gran destructora de la democracia, la desigualdad genera exclusión social”. 

Tiene razón,  desde fuera de la sociedad es difícil, sino imposible, participar e implicarse en la construcción democrática. Sin recursos sociales y económicos cuesta mucho inmiscuirse en lo colectivo y preocuparse por el buen funcionamiento de las instituciones.

La desigualdad se combate con recursos sociales , empleo y sobre todo con sistemas educativos que garanticen una igualdad de oportunidades en la formación, afirmo la presidenta del comisionado para la Memoria Histórica del Ayuntamiento de Madrid.

También subrayó Sauquillo la importancia de la lucha contra las pobreza.

Pobreza que es distinta a desigualdad. Erradicar la pobreza es una exigencia ética para favorecer las condiciones de vida digna de toda persona. 

La corrupción, continuó Sauquillo, ha desmoronado el sistema de valores de la comunidad social y política. La sociedad ha incorporado como actuaciones "normales", que además “justifica”, iniciativas que son deplorables y muy nefastas para la mayoría. La democracia necesita recuperar la colectividad como referente ético que impida las acciones personales y grupales irrespetuosas con el bien común.

Por último, en su intervención, Francisca Sauquillo expresó como una herramienta esencial de la regeneración democrática la necesidad de incorporar la tolerancia y el respeto al otro, así considero que la Ley de Memoria Histórica, aprobada por el gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero, es un instrumento valido para recuperar el diálogo entre quienes piensan diferente. Su tarea en el Ayuntamiento de Madrid es impulsar el cumplimiento de esta Ley, favoreciendo el encuentro y la reconciliación de los madrileños. 

El objetivo de la comisión que preside es incorporar a todos a la historia de la ciudad de Madrid.

Cómo moderador del acto exprese que también eran necesarias en la reflexión sobre las "Iniciativas para la Regeneración democrática" tres cuestiones:
1.- La democracia en España nos ha llevado al mejor momento colectivo de nuestra historia como país
2.- La política es servicio público en aras del bien común y en favor de los más débiles. 
3.- Criticar la Política es una señal de madurez democrática
El diálogo posterior entre todos los asistentes fue muy abierto y  participativo, resaltando, de las más de veinte intervenciones, las coincidentes en revitalizar el acerbo democrático desde la profundización de valores compartidos por cristianos y socialistas como son los de responsabilidad, justicia, igualdad de oportunidades....a partir de un proceso educativo generador de ella.

Se insistió en la necesidad de una mayor conexión de los políticos con los ciudadanos, proponiéndose el abandono del discurso del crecimiento económico como mantra salvífico. Está demostrado que el crecimiento de la economía no genera más cohesión social. 

También se expresó la oportunidad para superar la ecuación “ya votas =  no necesitas hacer más” y profundizar cómo impulsar las asociaciones y colectivos, autenticas escuelas de democracia.

Para finalizar se hizo hincapié en la importancia de recuperar la fraternidad como un referente de la democracia.